¿Modernización V/S Transformación Del Estado? ¿Qué Estado Necesita Chile?”
Con una convocatoria transversal y un enfoque técnico-político, el pasado seminario realizado por el Consejo de Especialidad de Ingeniería Comercial y Control de Gestión del Colegio de Ingenieros de Chile abordó una de las preguntas más urgentes para la arquitectura institucional del país:
“¿Modernización o transformación del Estado? ¿Qué tipo de Estado necesita Chile?”
La exposición magistral fue dictada por el profesor Ramiro Mendoza Zúñiga, abogado, ex Contralor General de la República de Chile, con una vasta trayectoria en el diseño y supervisión de políticas públicas, derecho administrativo y modernización del aparato estatal. Su presentación no solo abordó los aspectos normativos y técnicos del Estado chileno, sino que invitó a una reflexión profunda sobre los fundamentos éticos, comunicacionales y estructurales que sostienen nuestra institucionalidad.
Mendoza señaló que una simple modernización, entendida como digitalización de servicios o reestructuraciones parciales, es claramente insuficiente ante los desafíos actuales. En cambio, propuso una transformación integral del Estado, que contemple aspectos como:
- Un cambio cultural profundo, orientado a recuperar la confianza ciudadana.
- Una revisión del diseño institucional, que elimine duplicidades y promueva la coordinación interinstitucional.
- La adopción de un lenguaje claro y accesible, tanto en la ley como en la comunicación pública.
- Un fortalecimiento real de los sistemas de control y fiscalización, con énfasis en la rendición de cuentas.
Uno de los puntos de mayor profundidad fue la importancia del lenguaje en la gestión estatal. Mendoza explicó que las leyes mal redactadas, las resoluciones confusas o las normativas crípticas terminan minando la legitimidad del sistema. En consecuencia, el lenguaje debe dejar de ser una barrera y convertirse en una herramienta de acercamiento entre el Estado y la ciudadanía.
En relación con la estructura actual del Estado, el expositor ilustró la excesiva complejidad de sus 25 ministerios, y múltiples servicios lo que genera una burocracia dispersa, con escasa capacidad de coordinación efectiva. Esta fragmentación, sumada a una permisología paralizante, impide la ejecución oportuna de proyectos estratégicos para el país.
El profesor Mendoza también abordó la percepción de corrupción, un fenómeno que, incluso sin pruebas empíricas consistentes, socava la confianza pública y debilita la relación entre la ciudadanía y sus instituciones. Para enfrentar este desafío, planteó que la transparencia debe dejar de ser un eslogan y pasar a ser una práctica cotidiana, apoyada por tecnología, normas claras y una cultura institucional basada en la integridad.
Desde la perspectiva del modelo de gestión, Mendoza criticó la mezcla de lógicas burocráticas y gerenciales que no terminan de consolidar un sistema de alto desempeño. El foco debe estar en la calidad del gasto, la evaluación de impacto y la definición clara de responsabilidades. Sin estos pilares, los recursos públicos corren el riesgo de ser ineficaces, aunque sean legales.
Finalmente, el expositor subrayó que la transformación del Estado no es un asunto exclusivo de la clase política o del mundo jurídico. Requiere una colaboración intersectorial, donde ingenieros, científicos sociales, funcionarios, académicos y ciudadanos tengan voz. La transformación no es solo estructural: es también moral y cultural.
Como Consejo de Especialidad de Ingeniería Comercial y Control de Gestión, valoramos profundamente esta instancia de reflexión y reiteramos nuestro compromiso con fomentar espacios de diálogo, vinculación técnica y construcción de propuestas. Creemos firmemente que la ingeniería, como disciplina orientada a la eficiencia, la planificación y la racionalidad económica, tiene mucho que aportar al rediseño de las políticas públicas y al fortalecimiento del Estado.
Extendemos una invitación a todas y todos los colegas a colegiarse y a sumarse a las distintas comisiones del Colegio, especialmente a aquellas que trabajan en la intersección entre ingeniería y políticas públicas. Solo desde el compromiso activo podremos ser parte de la transformación que Chile necesita.
